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martes

Sobre Derechos y Deberes



LA LUCHA POR LOS DERECHOS Y EL OLVIDO DE LOS DEBERES: Una constante en la toma de decisiones
Por Giovanni Salazar Valenzuela
[1]


Hoy más que nunca nos hemos convertido en " sociedades de derecho" en ellas exigimos los derechos y eludimos los deberes. La realidad tajante es que hoy ya no se habla de lo que debemos hacer, sino de lo que podemos hacer. Podemos, clonar, podemos hacer alimentos transgénicos, podemos patentar hasta lo que hace poco era inpatentable, podemos hacer leyes para sustentar homicidios "piadosos" y podemos evadir los deberes legales, sociales, personales e incluso nacionales. Frente a la responsabilidad, se acentúa la queja, ya no se rinden informes sino que se formulan pliegos de peticiones. La evasión de los deberes parece ser también, una característica de la postmodemidad.

Los deberes tienen un andamiaje estructuralmente enraizado en la responsabilidad y esta indica las obligación que individual o colectivamente tenemos de responder frente a nuestros actos. La justificación de esos actos se dan generalmente por medio de razones validadas con arreglo a un sistema de valores generalmente aceptado. Lonergan afirma, que un deber original, "consiste en seguir las normas empotradas en nuestra conciencia..... el significado elemental de deber se descubre en las obligaciones que proceden de las normas de nuestra propia autenticidad" (Dunne,2002:71)

La responsabilidad es inseparable y exclusiva de nuestra condición personal. Es decir que solo las personas pueden ser responsables, como lo afirmara Tillich: “ el ser humano...es el único ser que es libre en el sentido de deliberación, decisión y responsabilidad”

Pero en la lucha por los derechos y el olvido de los deberes-, la misma libertad, es adecuada o acomodada e incluso redefinida, según sea el interés de una finalidad preconcebida. El problema de la libertad es un debate filosófico de complexión compleja. E! deber es un acto responsable ejercido con plena libertad.

Me identifico con el concepto de libertad (obsérvese otra definición) expuesto por el personalismo: "La Libertad, es e¡ valor fundamental cíe la persona alrededor del cual ^iran lodos los demás valores, la libertad consiste en el desarrollo de las capacidades del hombre para colocarlas al servicio de la comunidad" Pero esta libertad es algo que no esta del todo dado, es mas bien una conquista que la humanidad debe lograr. Podemos ser libres, pero eso no basta para que lo seamos, debemos trabajar en nuestras capacidades, en concientizamos de nuestra conciencia, de nuestra valía y de nuestra inherencia natural.

Los seres humanos actuamos mas por miedo al castigo, al que dirán, que por convicciones propias, y nos dejamos arrastrar por los otros y sus sistemas de creencias, muchas personas en el mundo entienden el deber como un castigo, como algo punitivo. Cuando no actuamos de esta manera, entonces optamos por otra vía fácil, la de seguir nuestro primer impulso, el deseo irracional.

No creo que hacer lo que uno quiere, lo que a uno "se le de la gana", sea libertad.,.. .parece mas esclavitud, no hay que confundir Libertad con libertinaje. La Libertad exige, que nos respetemos a nosotros mismos y a las otras personas, debemos considerarnos como fines en si mismos de nuestros actos y nunca como medios. (Kant) Tal vez, no podamos demostrar la libertad y la experiencia sociobiológica no nos ofrezca la posibilidad de sabemos distintos de meros autómatas biológicos, simples ''animales". Pero si nos queremos pensar como seres humanos libres, nos debemos pensar como personas que tenemos un deber consigo mismos y con nuestros semejante.

Ahora, puedo explorar el ámbito de los derechos, dejando claro que el concepto de derecho, al que hago referencia se sintetiza en la potestad que tiene cualquier miembro de la sociedad de hacer tal o cual acto, de gozar de tal o cual beneficio y de exigir los privilegios individual o mancomunadamente.

Como diría Lonergan "un derecho es una expectativa" Esta referencia se realiza dentro de uno de los temas (derecho) que se exigen mayoritariamente en nuestra sociedad contemporánea: La Dignidad de la Persona Humana. Creo que la Dignidad es consustancial al Ser, sin distinción de edad, sexo, color, creencia religiosa o política, situación civil, económica o étnica. Puedo entender que la dignidad es la conciencia de la propia valía y la inherencia de la naturaleza humana.

Al tener esta conciencia se que tengo valores, que son inseparables de mi naturaleza humana. Así mismo, puedo comprender que la dignidad es la capacidad de tomar conciencia de la propia valía. En el "Manifiesto al servicio del Personalismo" Mounier[2], establece tres conceptos, que a mi juicio, me ayudan a comprender la Dignidad de la persona humana.

• La Libertad, es el valor fundamental {le la persona alrededor del cual giran todos los demás valores. La libertad consiste en el desarrollo de las capacidades del hombre para colocarlas al servicio de la comunidad.

• El compromiso, es el segundo valor, de la persona y esta solo se hace libre con el compromiso (deber) en la acción, al colocar sus capacidades al servicio de los demás, de lo contrario la libertad no pasa de ser una palabra hueca y vacía.

• Para Mounier el individuo, es el ser humano, para el que las demás personas no existen, al contrario de la persona que es el ser humano proyectado hacia sus homólogos.


Para nadie es un secreto, que el personalismo recibe una basta influencia de las ideas del existencialismo y del vitalismo, pero a diferencia de estas, le brinda al ser humano un sentido definido de su existencia en el concepto de persona. Por ello, para mi, la persona humana, es un ser consciente y libre, que no puede reducirse, a una simple cosa, es la clave desde donde se debe interpretar la Declaración universal de los derechos del hombre, ya que esta se encuentra impregnada del personalismo.

La Dignidad de la persona humana, es un criterio fundamental para la toma de decisiones en Bioética, ya que en pleno siglo XXI en una sociedad altamente tecnificada y con una óptica desmesuradamente cientificista, (donde el hedonismo, parece ser el panum cuoíidianum) e! utilitarismo y el egotismo cultural, parecen olvidar que la civilización contemporánea padece una incapacidad casi congénita para apreciar en qué consiste realmente la sublime grandeza de cada persona. En este ámbito, la lucha por derechos y deberes ha creado vacíos morales, que hoy en día son abordados por la Bioética.

Por ejemplo, en debates tan encarnizados como la Eutanasia, se observa que los que favorecen la difusión y legalización de esta práctica ondean, entre sus argumentos preferidos, el derecho de toda persona a una muerte digna; y cómo los que se oponen a ella lo hacen también, justamente, sobre la base de un mismo principio inquebrantable: la intangible dignidad del sujeto y de la vida humana.(El personalismo me centra en esta parte)

Parece, pues, que la interpretación de dignidad y derecho sirve tanto para cimentar de manera radical y absoluta el respeto al hombre como, sincrónicamente, para justificar la violenta mutilación de su existencia terrenal. En medio de semejante contradicción la polémica se reduce a la utilización de los términos «dignidad» y "derecho" dentro de un contexto plurívoco centrado en su múltiple interpretación.

A mi juicio, la toma de decisiones, se debe cimentar sobre la dignidad de la ¡ persona humana (que es contraria al termino individuo) que es conciente de i su propio valor por medio de su inteligencia y que posee una inherencia de su naturaleza humana, aunque no esté tomando conciencia de su propia valía en este momento, o aunque nunca la haya tomado todavía es un deber, el / recordar que la persona humana es digna mientras duerme, o cuando está enferma o anestesiada, o cuando está en forma de feto; y máxime, desde el instante mismo de su concepción.

De igual forma y para finalizar no se puede olvidar que podríamos dar un gran paso para resolver estos debates, si entendiéramos que en la misma toma de decisiones se podría resolver la actual crisis de responsabilidad, si tan solo comenzáramos por reconocer que todo derecho trae un deber aparejado del mismo orden, podríamos hacer énfasis, en primer termino el ultimo de ellos antes que el primero; pues por lo general, el que cumple sus deberes no tiene que exigir sus derechos.



BIBLIOGRAFÍA· Beuchot, Mauricio, Sobre la Justicia, Revista Lógos, Mayo- Agosto UNAM, México,1999.
· Copleston, J. Historia de la Filosofía. Madrid. Ed. Gredos.1997
· Díaz, E y Colomer, J.E. Estado, justicia, derechos. Alianza, Madrid, 2002.
· Diccionario De Filosofía. Ed. Herder. Walter Brugger, 1978.
· Rojas, Arturo, Razones para la Fe. El ujier informa. Bogotá 2003

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[1] Licenciado en Filosofía y Letras, Especialista en Bioética,Magister en Ciencias de la educación
[2] Copleston, J. Historia de la Filosofía. Madrid. Ed. Gredos.1997

DERECHOS HUMANOS